Cargar a los más pequeños de energía con platos saludables ahora que tienen que enfrentarse a la vuelta al cole, es posible sobre todo si les haces partícipes del proceso de elaboración.
Te proponemos una serie de recetas frescas y saludables además de divertidas, para realizar con los niños y que disfruten con la comida sana.
Gelatina con Tuti Frutti
(Tiempo: 10 min # Raciones: 10) : cargada de proteínas, especialmente colágeno, es un producto poco calórico, sin colesterol y sana.
Ingredientes:
• 397 grs. 1 lata de Leche Condensada
• 303 grs. 1 taza de tutti frutti
• 1/2 taza de agua
• 8 grs.de 1 sobre de gelatina sin sabor
Se coloca el agua con la gelatina sin sabor 50 segundos en el microondas. Luego, en un recipiente debes mezclar la Leche Condensada, el tutti frutti y la gelatina disuelta en agua. Se vierte en pequeños recipientes y se deja en la nevera aproximadamente 1 hora o hasta que estén totalmente firmes.
Brocheta de frutas tropicales
Fresca, sana y colorida. Una manera diferente de tomar la fruta, con esta brocheta disfrutarán ellos y tú.
Ingredientes:
2 plátanos sin pelar 2 manzanas rojas Fruta tropical: puedes hacer la receta con piña, mango o cualquier otra variedad de fruta tropical. Brochetas de madera
Lava, pela la fruta y córtala en trocitos. Ensarta las piezas de fruta intercalando los colores. Puedes tomarla tal cual o puedes calentarlas en la sartén y asarlas: siempre que evites las variedades con mucha agua, como melón o sandía.
Batido de plátano y fresa
Los batidos siempre son una buena forma de darles verduras y frutas. Los batidos, llenos de nutrientes, antioxidantes, fibra y azúcares útiles te ayudarán a darles energía con una bebida refrescante y sana.
Ingredientes:
• 1/2 taza de fresas (pueden ser congeladas o frescas)
• 1 plátano
• 1 taza de verduras (espinaca, apio y pepino)
• 1/2 taza de leche de almendras sin azúcar
• 1 cucharada de polvo de proteína de vainilla
• 1 pizca de canela
Prepara las frutas con tu hijo/a cortándolos en trocitos después de lavarlos y pelarlos y añádelos a la licuadora. Echa todas las verduras y añade la leche de almendras, el polvo de vainilla y agrega la pizca de canela. Si quieres darle un toque puedes añadir un poco de leche condensada al gusto y deja que tu hijo le dé al botón de licuar para poner el proceso en marcha. Unos minutos después ¡ya tenéis la merienda lista!
